ASTROLOGÍA Y PSICOLOGÍA: DOS CAMINOS HACIA LA COMPRENSIÓN Y LA TRANSMUTACIÓN HUMANAS
La Astrología, para mí uno de los cuatro pilares del Conocimiento y la Sabiduría, es una disciplina que observa, analiza y estudia las posiciones y movimientos de los cuerpos celestes, en especial del Sol, la Luna, los planetas y las estrellas, relacionándolos con el desarrollo de los acontecimientos que se producen en la Tierra.
Los astrólogos fueron, seguramente, los primeros sabios de las primitivas civilizaciones, ya que la observación y el estudio del cielo suscitaron muy tempranamente el interés humano. La salida y la puesta del sol, separando la luz de la oscuridad, la influencia de la Luna en las cosechas, las mareas, los embarazos y los partos, la sucesión de las estaciones, son sólo algunos de los ámbitos en los que se podía palpar con facilidad la influencia en nuestro planeta de los cuerpos celestes y sus movimientos a lo largo del tiempo.
La Astrología es, por lo tanto, una ciencia y una práctica muy antigua que diferentes culturas han desarrollado independientemente, como por ejemplo la caldea, la china, la hindú y la maya. Dichas civilizaciones, observando a determinados astros, especialmente el Sol, y su influencia en la vida terrestre, desarrollaron un sistema de conocimiento muy amplio, en el que fueron incluyendo los movimientos de otros astros como representantes de nuevas facetas de la realidad cotidiana. Los cambios cósmicos estaban entonces muy unidos a las necesidades de la gente: los nacimientos, la caza, la búsqueda de refugio, la agricultura... y también a la mitología, los rituales de iniciación, las celebraciones..., conectando todo esto con la dimensión espiritual del ser humano y de la Vida en su conjunto, algo que durante siglos hemos dejado de tener en cuenta.
La Astrología, para mí uno de los cuatro pilares del Conocimiento y la Sabiduría, es una disciplina que observa, analiza y estudia las posiciones y movimientos de los cuerpos celestes, en especial del Sol, la Luna, los planetas y las estrellas, relacionándolos con el desarrollo de los acontecimientos que se producen en la Tierra.
Los astrólogos fueron, seguramente, los primeros sabios de las primitivas civilizaciones, ya que la observación y el estudio del cielo suscitaron muy tempranamente el interés humano. La salida y la puesta del sol, separando la luz de la oscuridad, la influencia de la Luna en las cosechas, las mareas, los embarazos y los partos, la sucesión de las estaciones, son sólo algunos de los ámbitos en los que se podía palpar con facilidad la influencia en nuestro planeta de los cuerpos celestes y sus movimientos a lo largo del tiempo.
La Astrología es, por lo tanto, una ciencia y una práctica muy antigua que diferentes culturas han desarrollado independientemente, como por ejemplo la caldea, la china, la hindú y la maya. Dichas civilizaciones, observando a determinados astros, especialmente el Sol, y su influencia en la vida terrestre, desarrollaron un sistema de conocimiento muy amplio, en el que fueron incluyendo los movimientos de otros astros como representantes de nuevas facetas de la realidad cotidiana. Los cambios cósmicos estaban entonces muy unidos a las necesidades de la gente: los nacimientos, la caza, la búsqueda de refugio, la agricultura... y también a la mitología, los rituales de iniciación, las celebraciones..., conectando todo esto con la dimensión espiritual del ser humano y de la Vida en su conjunto, algo que durante siglos hemos dejado de tener en cuenta.
La Astrología ha logrado pervivir a lo largo del tiempo y de los intentos por desprestigiar su valor y su utilidad, además de estar recuperando el lugar que le corresponde en el saber humano y que nunca debió perder. Este renovado interés por la sabiduría astrológica es algo completamente necesario, coherente y lógico, que está en consonancia y sincronía con los cambios de conciencia y de acción que de ahora en adelante debemos realizar.
La herramienta básica de trabajo para l@s astrólog@s es la Carta Astral. Para levantarla son imprescindibles los siguientes datos: hora exacta, día, mes, año y lugar de nacimiento. Con ellos obtenemos un gráfico en el que queda reflejada la posición que los cuerpos celestes: planetas y otros puntos, tenían en el momento exacto de nuestro nacimiento. Este primer tema es la Carta Natal, una especie de manual de instrucciones cósmicas, directamente relacionado con nuestro camino de evolución en la rueda de las encarnaciones y, dentro de él, con los aprendizajes, experiencias, relaciones, misiones... que en cada vida debemos llevar a cabo, para manifestar y realizar aquello que ese mapa astrológico señala y promete, elevando así un poco más cada vez nuestra conciencia y nuestro espíritu.
La Astrología, en cualquiera de sus vertientes, proporciona conocimiento y comprensión, tareas que comparte con la Psicología. Ambas forman un excelente equipo y nos proporcionan muchas herramientas para realizarnos como seres únicos, una vez resolvemos nuestras dificultades, sanamos nuestros padecimientos, corregimos nuestros defectos y desarrollamos nuestras virtudes, requisitos imprescindibles para relacionarnos óptimamente con el resto del mundo, hacer cosas en él y servirle como se merece.
¿Te encuentras perdid@, descontent@, frustrad@, desanimad@ y con poca ilusión ante la vida? ¿Sientes que podrías ir mucho más lejos y más alto? ¿Piensas que puedes cambiar tu vida y ser realmente tú, pero te da miedo intentarlo? ¿Quieres vivir en un mundo mejor? La Astrología y la Psicología responden a tus preguntas y te dan soluciones.
La herramienta básica de trabajo para l@s astrólog@s es la Carta Astral. Para levantarla son imprescindibles los siguientes datos: hora exacta, día, mes, año y lugar de nacimiento. Con ellos obtenemos un gráfico en el que queda reflejada la posición que los cuerpos celestes: planetas y otros puntos, tenían en el momento exacto de nuestro nacimiento. Este primer tema es la Carta Natal, una especie de manual de instrucciones cósmicas, directamente relacionado con nuestro camino de evolución en la rueda de las encarnaciones y, dentro de él, con los aprendizajes, experiencias, relaciones, misiones... que en cada vida debemos llevar a cabo, para manifestar y realizar aquello que ese mapa astrológico señala y promete, elevando así un poco más cada vez nuestra conciencia y nuestro espíritu.
La Astrología, en cualquiera de sus vertientes, proporciona conocimiento y comprensión, tareas que comparte con la Psicología. Ambas forman un excelente equipo y nos proporcionan muchas herramientas para realizarnos como seres únicos, una vez resolvemos nuestras dificultades, sanamos nuestros padecimientos, corregimos nuestros defectos y desarrollamos nuestras virtudes, requisitos imprescindibles para relacionarnos óptimamente con el resto del mundo, hacer cosas en él y servirle como se merece.
¿Te encuentras perdid@, descontent@, frustrad@, desanimad@ y con poca ilusión ante la vida? ¿Sientes que podrías ir mucho más lejos y más alto? ¿Piensas que puedes cambiar tu vida y ser realmente tú, pero te da miedo intentarlo? ¿Quieres vivir en un mundo mejor? La Astrología y la Psicología responden a tus preguntas y te dan soluciones.
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